Conjunto Arquitectónico de Quejana (Aiara, Álava)

Visitamos el que fue el hogar de don Pedro López de Ayala, un ilustre caballero, poeta, cronista de cuatro reyes, diplomático, guerrero y consejero real, además de precursor del Renacimiento. Todas estas cualidades le convirtieron en un brillante personaje de la Edad Media. 
En este pequeño núcleo de Quejana nos encontraremos el palacio fortificado y el convento de las dominicas que fueron construidos por el padre de don Pedro, Fernán Pérez de Ayala. Son parte del conjunto monumental más importante de esa época que se conserva en Álava. Este conjunto lo completan la iglesia de San Juan y la capilla torreón de la Virgen del Cabello. 

En la capilla se hallan la tumba de alabastro del canciller y de su mujer, Leonor de Guzmán, la única en todo el País Vasco, puesto que entonces lo habitual era utilizar la piedra. También aquí se encuentra el retablo gótico del siglo XIV, copia del original, encargado a la escuela navarra, que se encuentra en el instituto de Artes de Chicago.

El salón de la torre, encima de la capilla, nos traslada a la época medieval con sus pequeñas ventanas, su puerta reforzada de hierro y sus muros de casi dos metros de anchura.

La iglesia de San Juan, fue inicialmente una pequeña capilla anterior a la construcción de la torre pero en el siglo XIV la empiezan a modificar para unirla con el convento, ya habitado.

También se puede visitar el museo de arte sacro, en lo que fue el palacio fortificado, que nos acerca a la historia del monasterio, a la genealogía de tan poderosa familia y a sus objetos característicos como espadas, cantorales o utensilios de trabajo de las dominicas.